sábado, 25 de febrero de 2012

El sutil y exquisito arte de estar despierto un Sábado por la madrugada.

Hola. Me llamo Israel... y tengo un problema... En realidad muchos, pero de momento, tengo uno en la mente. Metafórica y literalmente hablando.

No se decir exactam
ente el porqué. Mi mejor teoria es que se debe a que mi padre solía levantarnos temprano prácticamente todos los días de nuestra vida, a mi hermano y a mí. De niño la única razón para poder estar en cama después de las seis de la mañana (siete en invierno cuando aún no había cambio de horario) era haberse metido a la cama después de las dos o tres de la mañana.

Mi padre solía decir que había que levantarse temprano para aprovechar el día. Yo creo que mas
bien lo obsesivo-compulsivo dentro de márgenes socialmente funcionales es algo que se hereda. Ergo, mi padre está igual de dañado que yo. O más apropiadamente: "Gracias, Padre, por robarme horas de sueño y devolverme horas de actividad mental".

La verdad es que no estoy seguro de si eso último fue sarcasmo.

Anoche descubrí el AutoCAD WS para Android. En realidad es un visualizador
glorificado, pero eso fue suficiente para recordarme que tengo un proyecto pendiente que quizá sea bueno retomar. Así que mi cerebro me dijo (usando el clip de audio de mi padre diciendo que hay que aprovechar el día) que ya era hora de levantarse y ponerse a dibujar y escribir. No importa que sea Sábado a las cuatro de la mañana.

Así que me levan
té, abrí mi laptop, fui al refri por yogurth de manzana, me puse mis audífonos, música en completo random, y a revisar el status de mi proyecto (del que les hablaré conforme avance).

¿De qué va el proyecto?, bueno, veamos.

Desde que tengo memoria, los aviones siempre me han fascinado. Si tuviera que mencionar un buen recuerdo de mi abuela, fue que un día que fuimos al aeropuerto a recog
erla, su vuelo se retrazó, así que mientras la esperábamos, mi padre me llevó al estacionamiento de la (en aquel entonces) única terminal, Ese alto de pisos de colores. Desde ahí se veían las pistas y por supuesto, aviones y aviones llegando y partiendo. Hasta ví un helicóptero despegar.

Ya lo comenté antes, si no me aterraran de muerte las montañas rusas, si
no me sudaran las manos cuando juego cosas como Assassins Creed o Mirror's Edge, si no se me contrajera el estómago en el cine mientras Tom Cruise escala un edificio en Dubai, quizá, y sólo quizá, hubiera sido piloto de avión caza.

Pero como no, tuve que buscarme lo más cercano. Y me hice ingeniero en robótica para poder diseñar Varitechs.


El que el Varitech esté por encima de todo, a la altura de Pink Floyd, no es coincidencia.

Sí, ya se que son ficticios, soy saludablemen
te obsesivo/compulsivo, no esquizofrénico. Aún así, como camino obvio, en algún momento fui modelista y armé todo tipo de vehículos aereos militares. Aviones modernos, helicópteros de asalto, aviones de la segunda guerra mundial, incluso una X-Wing en algún momento en que incluso entramos (el, en ese momento, mi mejor amigo y yo) a concurso (en el que no ganamos nada, pero la experiencia valió mucho la pena). Desafortunadamente comencé a tener sobrinos (hijos de mis primos) y esa sutil diferencia entre un juguete y no juguete es un poco borrosa para esos engendros de satán.

Dejé de armar aviones desde entonces. Hasta que llegué al peor año laboral de mi vida.


Entré a trabajar a e
sa compañía para desarrollar proyectos de transportadores. Muy poco control, mala paga, pero prometían mucha experiencia, y el tráfico de materiales siempre me ha interesado, así que caí en la trampa. Debí saber que no era el mejor lugar cuando en el examen de AutoCAD les impresionó que supiera cambiar entre layouts.

He
de confesar: En ese momento, para mí, AutoCAD era sólo una herramienta de dibujo. No tenía idea de cómo usar el 3D, así que era sólo un software para hacer planos y diagramas. Llegué a usarlo en mis aventuras de rol para algunos dibujos y mapas, pero nada más allá.

Ese tipo de dibujos era lo que req
uería mi trabajo, pero porque las cosas llegan cuando deben llegar, un mes después de mí, entro un dibujante que un buen día me enseñó lo más básico del 3D (Polyline, Extrude, Revolve, Add, Substract, Intersect, y sólo eso). Ahí se destapó la coladera.

Ese mismo día estaba dibujando mi primer misil detallado. Una semana después, un asiento de F-18. En ese entonces le de
dicaba un buen de mi tiempo libre al juego de rol con El Dado Norte (así nos llamábamos... y nos seguimos llamando). Tenía yo un proyecto de juego casero llamado Company Soldier. En éste, como en muchos otros proyectos caseros, había vehículos ficticios y, porque sí, me puse a dibujar uno, sólo para ver hasta dónde podía llegar con mis nuevas y (según yo) enormes habilidades de dibujante.


¡Irad!

La verdad es que éste es un dibujo tosco, apresurado y poco elegante. Justo como la primera vez que uno tiene sexo. P
ero justo como la primera vez que uno tiene sexo, nomás no se olvida.

Algunos
años en el futuro, ya instalado como jefe de ingeniería, el AutoCAD se convirtió en algo de uso diario. Lo mismo para realizar mapas de transmisión de datos, que para hacer diseños mecánicos para producción, planos eléctricos. Incluso, el uso lúdico de dibujar posters de celdas de manufactura completas para que los vendedores presentaran sus propuestas.

Ultra alta tecnología... con monitores CRT.

Y pues resultó que llegó Cars (Jo
hn Lasseter, Joe Ranft, 2006), la película de Pixar. Película entrañable para cualquier amante de los autos o que haya crecido en un taller mecánico. La atención al detalle, por ejemplo, del aceite escurriendo en el carter de los tractores que Mate y McQueen voltean, es una de esas cosas que siempre ha caracterizado a Pixar.

Es por esa misma atención al detalle que esuché el metafórico rayón de acetato (jóvenes de más d
e veinte, el equivalente a que brinque el CD, pubertos, ustedes no sabrán lo que es eso, disculpen) cuando al comenzar la gran carrera una formación de AV-8B Harrier cruza volando sobre la pista. El Harrier de Pixar tiene dos derivas.

El Harrier sólo tiene una.

Este minúsculo e insignificante detalle dio vueltas en mi cabeza po
r muchísimo tiempo. ¿Porqué los dibujantes hicieron eso? No puede ser un error, es demasiado obvio. ¿Porqué? ¡Oh Dios!, ¿Porqué?

Y entonces la chispa prendió en mi cabeza. Shoji Kawamori, el director de
Macross (Robotech pa los cuates) es ingeniero mecánico, por eso sus diseños hacen tanto sentido, por eso lo aterrizado de su fantasía. Incluso hay quien me comentó que estuvo involucrado en el diseño de la primera generación de Transformers (en realidad, más de lo que ves). Pixar, por otro aldo, también se tomó esas libertades por alguna razón, la que sea. Entonces... ¿y sí yo hago mis propios diseños? ¿como cuando era modelista, pero sin riesgo de que mis sobrinos rompan nada?



El mecanismo hidráulico compensante para la pata de apoyo.

Un cañón de 70mm.


Un MAC (cañón de aceleración magnética).




Un motor universal para articulaciones.


Un Flak-AA que usa un sistema (en ese momento imaginario) de detonación inteligente (que pueden ver en acción aquí... malditos, me robaron mi idea, incluso las municiones son azules. brinquen al 1:50).


Por cosas de age
nda este proyecto ha estado algo olvidado, pero tengo la intención de revivirlo. Ya les estaré platicando cómo va.

Hace un par de meses por fin me enteré de la razón por la que ese Harrier tiene dos derivas. Resulta ser que no es un Harrier. Se llama Marco F/AV-18E, y es el hijo de un F-18 Hornet y un AV-8B Harrier. Eso, desde la perspectiva de Cars, tiene
todo el sentido del mundo. Pixar simplemente fue una generación adelante, y de pasada, me dio un gran hobbie.



Rule 34. No exceptions.

jueves, 9 de febrero de 2012

The End is Near...ish.

Dentro de algunas décadas, nuestros nietos nos preguntarán cómo fue el inicio del milenio. Habrá documentales tratando el tema y aquellas cosas que recordemos, les parecerán extrañas y ajenas. Justo como los 60s para nosotros.

Dice Umberto Eco que las dos corrientes que divergen en cuanto
a la cultura de masas son los que se aferran al lado conservador y los que se regodean en la democratización del conocimiento (Apocalípticos e Integrados, Umberto Eco, 1965).

Sin ir a un estudio profundo de estas dos tendencias (¿qué más podría yo agregar?), estamos viviendo una serie de cambios y costumbres tan fuertes como las de los 60s (nuevamente, no
ahondo, hay documentales mucho mas convincentes que cualquier texto que pudiera poner aquí). Una nueva revolución cultural y social.

Sin embargo, igual que nuestros padres en los 60s, pasamos por la vida sin prestarle atención. Ese tipo de cosas sólo se ven hacia atrás, a menos que seas un muy mal escrito Diego Rivera (Frida, Julie Taymor, 2002). No es algo que tengamos presente simplemente porque a nosotros nos parece natural.

Dentro de algunos años, décadas quizá, nuestros nietos nos preguntarán si era cierto que bastaban unos minutos y una conexión a internet para obtener cualquier información que deseáramos. Que si era cierto que nadie gobernaba ni regía realmente el internet, y que si era cierto que hubo casos en los que los mismos usuarios podían financiar la creación de obras como si fueran los mecenas del renacimiento.

Aquí ustedes podrán decir "Esas son noticias atrasadas; ¿no escuchaste que ya tiraron a la basura la SOPA?"

Bueno, les tengo una mala noticia: Nuestra orgía de bits libres y anárquicos no va a durar mucho tiempo. No al menos como la hemos vivido. Y no me estoy poniendo dosmildoceoso. No hablo de la ley Döring ni de ACTA. Hablo de la historia humana.

La historia humana tiene siempre el mismo perfil. Un periodo de expansión ideológica, después un periodo de masificación de dicha ideología, un periodo de decadencia, un periodo de oscurantismo, y repetir ad nauseam. Desde el descubrimiento del fuego, la agricultura, el comercio, hasta la revolución industrial y el transistor. Cada vez los ciclos son mas cortos, también debe decirse. Herramientas que sirven para hacer herramientas siempre han facilitado el camino para las siguientes herramientas. Dijera Sagan, estamos parados sobre los hombros de gigantes (Los Dragones del Edén, Carl Sagan, 1978. Sí, ya se que la frase es mucho más vieja, pero el mejor desarrollo de la metáfora está en este libro).

No estoy diciendo que este ciclo esté por terminar. Puede que aún le quede un par de décadas en los que crecerá agigantadamente. Eso no importa. Eventualmente habremos de caer en el siguiente valle del ciclo. Sin embargo, existe un terrible problema, ahora de orden social: No sé qué tan rápido podamos adaptarnos.

Explico: Mi padre vio un comercial de una pasta dental donde unos dentistas (de esos de piel perfecta sospechosamente parecidos a actores/modelos en laboratorios futuristas) movían un mouse y la imagen en la pantalla transparente de CGI se desplaza
ba. Mi padre me pregunto si yo sabía manejar uno de esos. Originalmente pensaba que se refería a su imaginaria interfase.

En realidad se refería al mouse.

Mi padre es un genio con los motores. y hay pocas cosas que no sepa de fierros. Pero por las circunstancias de su vida, nunca ha tenido que ver con computadoras. Algunas personas, en cambio, no tienen razón para no saber.



!Woa! !Anonimus debe usar al menos 5 hackers por teclado!
(El chiste me lo volé de Cracked porque está muy bueno)


Bueno. Entre él y mi sobrino de tres años y medio que se mueve a su antojo en el iOS, hay una brecha tecnológica gigantesca. Nosotros fuimos la última generación en la q
ue se usaron los mandos mecánicos (¿quién no recuerda con cariño el chasquido de la televisión al cambiar con una perilla mecánica entre los trece canales VHF?). Sómos también la última generación en que las caricaturas comenzaban a las tres de la tarde y por la noche los canales cerraban su programación con un "Son las diez de la noche... ¿sabe usted dónde están sus hijos?"

Mi sobrino técnicamente nació con los drivers para operar interfases abstractas donde un iconito representa una idea y gestos en la interfase disparan una acción, opuesto a ideas concretas o acciones físicas. Mi padre y su generación crecieron moviendo perillas, llaves, palancas; mirando l
uces indicadoras para eventos específicos. Que sigue siendo avanzado contra la interpretación de manómetros y silbatos de la Revolución Industrial o el orden de los nudos en un Quipú.

Para mi sobrino y su generación, el estar conectados con sus amigos en todo momento, el poder acceder a todo tipo de información, el poder obtener una obra en unos cuantos clicks, será algo completamente natural. Para nosotros, aún es motivo de asombro que no se ha perdido del todo con la cotidianidad, porque nos tocó vivir la época en que el "un correo" aún significaba un sobre de papel con pap
el con letras impresas adentro.

Pues bien, Aquellos encargados de hacer leyes, simplemente no están capacitados para opinar al respecto, porque "no han tenido la oportunidad" (no se han dad
o el tiempo, y que no me salgan con que están muy ocupados, bola de holgazanes). El día que supe que a todos nuestros afables diputados les habíamos comprado con nuestros impuestos sus nuevas y flamantes iPad, mi primera pregunta fue si sabrían escribir.

El caso no está limitado a nuestro gobierno. La propu
esta de leyes de este tipo no es cosa de nuestro país. De hecho la ley Döring es una mera situación de "nosotros también" que no fue analizada, sólo promovida por ejecutivos con el mismo potencial analítico. Dadas las circunstancias actuales, la mutación de mercado es algo que no va a parar y si las disqueras y estudios de cine no terminan de adaptarse, tenderán a aferrarse a su poderío pasado a través de leyes anacrónicas (vestido de gala que de vez en vez usa la palabra "obsoleto").

Pero eso fue sólo el primer berrido. Muchos más habrán de venir. En primera, porque la naturaleza humana es temer a lo desconocido, y la gente encargada de gobernar e
s tan primitiva como cualquiera (quizá más). En segunda, porque como apuntaba al inicio, tarde o temprano, como humanidad, esta vez coordinados globalmente, habremos de entrar en una etapa de decadencia y oscurantismo que dificilmente durará otros mil años como la vez más famosa, pero igualmente habrá de ocurrir.

No. No tiene nada que ver con Fundación. Asimov basó su novela en ideas y teorías previas. Si no han leido esa serie, háganse un paro y léanla. Eso es ciencia ficción y no payasadas (Fundación et al, Isaac Asimov, 1952 y subsecuentes).


Disfrutemos pues de esta, nuestra época dorada de la información. No sabemos cuánto más podremos disfrutar de nuestros excesos digitales, pero tarde o temprano habrá de mutar, y será una mutación más del orden de Akira que del orden de X-Men.


Vamos a necesitar algunos RPGs, quizá muchos RPGs.

¿Cuánto durará? No hay modo de saberlo. Lo mismo podría durar unos cuantos días, con la velocidad actual de aceptación masiva (véase el caso de estudio "It's friday", Rebbeca Black, 2011) o quizá será un poco mas longeva, como la última época de decadencia y oscuantismo que asoló a la tierra, mejor conocida como Los Ochentas.



Take my breath awaaaaay...

lunes, 6 de febrero de 2012

Ding! (Edición 2012)

Achievement Unlocked: Six and thirty and sane still. (20g) Haber sobrevivido al año pasado sin haber pisado un manicomio en calidad de paciente.

Es nuevamente esa época del año en la que expreso mi agradecimiento a las cosas importantes del año. Así que si me permiten, comienzo:

-Muchas gracias por tener sanos a Laura Gabriel, Leonardo y Luna Sofia Candelaria. Sip, tuvieron sus respectivas enfermedades, pero fueron de esas que los harán fuertes para el resto de su vida.

-Muchas gracias por mi tendero local, que ya maneja Manzanita Deliciosa Y, porque Dios me ama, Yoli.

-Muchas gracias (muchas) porque ya no anuncia mi autobús el mismo asno que decía Tecama. Ese ya es un problema menos. Ahora sólo quítenle los celulares a los que ignoran que los audífonos son una obligación cívica si quieres escuchar música en el camión. Sin distinción de gusto de música... o ausencia de.

-Gracias porque un experimento social que hice a durante este pasado año superó por mucho mis mejores y más guajiros pronósticos. Sin ese experimento, este año no hubiera sido ni remotamente una décima parte de lo divertido, interesante y motivante que fue.

-Gracias a la vida por recordarme que Inteligencia, Sabiduría y Cultura son tres aspectos de un mismo árbol de habilidades. Y que una sin las otras no lleva a buenos puertos.

-Gracias por Gears of War 3, Modern Warfare 3, Rockband 3 y Assassins Creed Brotherhood, al que, si no le hubieran cambiado el nombre, hubiera sido AC 3. Si, técnicamente los últimos dos son mas viejos, pero llegaron a mi consola durante este año pasado y son mis agradecimientos.

-Gracias por Guadalajara. Aún durante los Panamericanos.

-Gracias por el reparto de personajes actual. Variopinto, patidifuso y policultural. Esos son los buenos grupos. Ahí nacen las buenas historias.

-Gracias, todas, por antener sanos a todos los míos. No hay agradecimientos suficientes.

Y bueno, pasado ese punto, un recuento rápido: Esta temporada (la séptima, me parece) será reconocida como "esa temporada en la que los personajes importantes se duplicó y a ratos, incluso se triplicó".

Mucha gente (no necesariamente nueva) comenzó a tener incialmente recurrencia, y poco a poco un mayor peso en la trama general. Como buena obra, al aumentar los personajes, aumenta el número de arcos dramáticos. Son sus entrecruces y sus vericuetos, y un exquisito timing, lo que hizo que esta temporada fuera tan interesante.

No todo fue Achivements ni altos KDRs, hubo momentos densos, tristes, fríos. Algunos personajes finalmente hubieron de salir de la serie con un emotivo tema de despedida. Such is life.

Pues bien, cuidaremos que este año afiancemos las cosas importantes, exprimamos las cosas divertidas, aprendamos de las cosas desagradables y vayamos un poco más al cine.

Ahora, mis sugerencias para regalos:

-Audífonos para todos los que llevan música en su celular: así como el Juguetón o el Teletón, hagamos una colecta para todos los niños pobres que tienen dinero para un celular, pero no para audífonos. Podríamos llamar a la campaña "Ponte tus jodidos audífonos por la paz".

-Mountain Dew: ya tengo Yoli, ya tengo Manzanita Deliciosa. No dejo de agradecerlo. Pero Los tres Chiflados, Los Tres Ases, Los Tres Mosqueteros, La Santísima Trinidad, el Bizarre Love Triangle, no son coincidencia; son un signo de que el universo funciona en tríos (Los Tres de Chile y el McTrío no cuentan, Cuidaos de los falsos profetas).

-Si las cosas siguen el curso pronosticado, evitar caer en una continuación o repetición del arco dramático T2-T6 (13/7). Tener suficiente sabiduría para hacer de ese arco una versión 2.0, actualizada, más madura y más productiva.

-Tenedores. En días pasados hice limpieza exhaustiva de mi cocina y encontré que poseo únicamente cuatro. No se puede ir por la vida con tan pocos tenedores
.