domingo, 16 de diciembre de 2012

Siempre hay cosas peores.

Encontrábame yo muy contento escribiendo la reseña de El Hobbit: un viaje inesperado (que pueden leer siguiendo este conveniente link), cuando recordé que hubo ya más de un intento de adaptación a cine y televisión. Como siempre, ocurren aciertos y desatinos. Más desatinos que otra cosa.

Les dejo este clip de un graaaaan desatino de El Hobbit, y sí, ese es el mismo Leonard Nimoy de Star Trek.


Pero no se confundan. Existen cosas mucho peores; de esas que los autores preferirían olvidar.



martes, 27 de noviembre de 2012

De que le trabajan, le trabajan.


Hablemos de actores badass: ¿cuál es el más fuerte? ¿cuál el más varonil? ¿cuál el más convincente?

Mas interesante: ¿cuál es el que tiene más películas?

¿Quieren saber cuál es?

Estoy escribiendo el artículo para Letras con Pelotas. Cuando lo termine, podrán leerlo aquí ... si no hay link, es que aún no lo publicamos, duh! (Adendum: este es el link al artículo ya publicado. La lista que están por leer cambió un poco, pero allá pueden leerla completa).

Pero mientras publicamos, vayamos estableciendo un par de detalles. Cuando me puse a investigar, recurrí a los actores de acción típicos. Conforme ahondé, me dí cuenta de que los más comunes no son, ni de broma, los que juntan más películas. Consideren esto una pequeña lista de los actores de acción con más películas en su haber:

#15 Chuck Norris.
Conocido por: chistes en internet.
Ni con todos sus chistes pudo alcanzar un lugar más digno. Únicamente 38 películas. Supongo que no todo se arregla con una patada voladora.


#14 Arnold Schwarzenegger
Conocido por: el estado de California.
Después de ser un bárbaro, un agente secreto, un padre desesperado por un juguete, únicamente se queda con 49 películas. He won't be back.


#13 Sylvester Stalone
Conocido por: tener la boca chueca.
Con papeles emblemáticos con nombre cliché de los 80´s como John Rambo, Rocky Balboa, Lincoln Hawk o Marion Cobretti, se supera a sí mismo con Angelo "Snaps" Provolone. Sólo 64 películas.


#12 Clint Eastwood
Conocido por: sentirse con suerte, punk.
No se puede hablar de las películas de vaqueros sin mencionarlo. No se puede hablar de las películas de policías sin mencionarlo. No se puede hablar de películas de guerra sin mencionarlo. Sólo no mencionen que apenas tiene 68 películas.


#11 Liam Neeson
Conocido por: haber entrenado a Obi-Wan Kenobi Y a Batman.
Con toda mi simpatía por haber puesto en su lugar de una cachetada a Orlando Bloom y por grandes persecuciones en Europa, Liam Neeson no se salva de éste lugar ni con todos los judíos a los que salvó. Sólo 88 películas.


#10 Bruce Willis
Conocido por: [spoilers!] estar muerto todo el tiempo.
Sigo preguntándome cómo es que Demi Moore prefirió a Ashton Kutcher... ah, si, sólo 93 películas.


#9 Chow Yun-Fat
Conocido por: Montones de películas de las que no tengo la menor idea de cómo se pronuncian.
El Tigre y el Dragón es una gran película, pero su balance general queda en cero por haber sido el Maestro Roshi en esa versión de Dragon Ball que nadie quiere recordar. Por lo menos, finalmente rompimos la centena: 107 películas.


#8 Jackie Chan.
Conocido por: hacernos reír con las escenas fallidas en los créditos.
Habiendo hecho a Passepartout, personaje que también hiciera Cantinflas (que no era actor de acción, por eso no está en la lista, pero, 51 películas, por si tenían curiosidad), y con la capacidad de encontrar mujeres asiáticas con las cuáles hacer pareja, así fuera a mitad del Seregeti, Jackie Chan alcanza un muy digno número de 113 películas.

Estos son los actores con más películas en su haber, posiciones 15 a 8.

Un adelanto: Christopher Walken, conocido por bailar sin gravedad en los hoteles, y quién, si se lo pides amablemente sale hasta en tu video escolar, fue mi primera apuesta por el actor de acción con más películas. Lejos estaba yo de imaginar que dificilmente llegó al séptimo puesto.

Los otros seis son grandes actores de los que, estoy seguro, han visto en más de una película.

El primer lugar casi triplica las películas de Walken, y estoy absolutamente seguro de que quedarán sorprendidos cuando sepan quién es.

Los dejo entonces, me voy a seguir escribiendo el artículo.




lunes, 19 de noviembre de 2012

De las historias cotidianas.

El miércoles pasado publiqué en Letras con Pelotas una lista de anécdotas curiosas de la ciudad. Cosas ligeramente extraordinarias de lugares cotidianos. Pueden echarle un ojo aquí.

Éste tipo de artículos (donde comienzas con mucha información que debe confirmarse, después agruparse, dársele forma y formato final de lectura) me gustan bastante. Suele llevarme por caminos que nunca sospeché. Muchas de las veces comienzas escribiendo con un tema en mente, con un título o una concatenación de ideas, pero, igual que un buen escultor, que sólo quita lo que le sobraba a la piedra, escribir un buen artículo es sólo darle palabras para que el artículo mismo termine diciéndote de qué es y qué va a decir.

El gran problema es que por el mismo flujo del artículo muchas veces tienes que recortar información o quedarte con piezas que no entraron en al versión final.

Para el citado artículo, por ejemplo, me faltó dejarles este mapa como referencia. Es un comparativo de cómo ha crecido la Ciudad de México a través de los siglos.

Existía una mención al Fantasma de Canterville (Oscar Wilde, 1887). finalmente se eliminó, pero, si no lo han leído, háganlo; esta historia seria una gran influencia para las películas gore de finales del siglo pasado, aunque haya sido escrito a finales del antepasado.

Finalmente, para terminar con los ejemplos, comentaba acerca de la canción Corazón de Neón. La mayoría de la gente conoce la versión de La Orquesta Mondragón:


Pero existe también una versión por Lolita Cortés.



Sin embargo, la canción es original de Joaquin Sabina (aquí con Andrés calamaro) .


Consideren esto un Special Feature de la edición de lujo del DVD o Blu ray. O, si son un poco mayores, el Bonus Track de un disco edición internacional. Veremos el subir comentarios y notas de los siguientes artículos.

Por aquí ando, escribiendo.



sábado, 10 de noviembre de 2012

YYY... estamos de vuelta.

Dice la fecha aquí arriba, al compararla con la fecha de la entrada anterior, que han pasado  dos meses desde que escribí algo aquí. Si no fuera porque las fechas no mienten, no creería que han pasado arriba de un par de semanas.

La mera verdad es que me la he estado pasando muy bien en nuestro proyecto, y, entre la organización, el ver cómo va creciendo y lidiar con todos los nuevos problemas de los que ni idea tenía, no he encontrado tiempo de calidad para escribir aquí.

Bueno, algunas veces, cuando no encuentras tiempo, tienes que hacerte tiempo. Por eso escribo desde el comedor de mi oficina (aunque lo suba por la noche). 

Obviamente no todo ha sido miel sobre hojuelas. Parece ser que los escritores de este sitcom que es mi vida, decidieron que a casi todos los personajes importantes nos iría mal durante Octubre. Aún así, encontramos cosas interesantes qué decir y contar. Y, finalmente, poco a poco fuimos encontrando razones para seguir echándole ganas.

...malditos escritores.

Pero me desvío. Déjenme contarles algo medio curioso: por mi trabajo, tiendo a ser ligeramente neurótico con los procedimientos, resultados y agendas. Tengo una firme convicción (mis allegados dicen que raya en el desorden obsesivo compulsivo) de que pocas cosas existen que sean más importantes que el compromiso con la tarea que uno se impone. En otras palabras, las cosas se hacen bien o no se hacen.

Eso suele traer problemas cuando me veo obligado a trabajar en equipo con gente que tiene un nivel de compromiso más... casual. Más de una vez he preferido cargar con un proyecto a cuestas yo solo, que confiar en gente que no me parece igual de comprometida. Como ya he expresado antes, esa es una de las cosas por las que amo mi trabajo actual, porque trabajo con gente al mismo nivel de compromiso (a veces pienso que más...'chesenfermos).

Hace algunos años, allá por el lejano 2000, tuve la oportunidad de colaborar en la formación de un grupo muy dinámico y con gran potencial. El Dado Norte fue una gran época en mi vida, y, hasta el día en que hube de dejar el grupo, fue una de las mejores experiencias creativas en las que he participado.

Aunque gran parte de ese grupo se transmutó en lo que hoy es Letras con Pelotas (más otros nuevos colaboradores), mentiría si dijera que somos el viejo grupo. Letras con Pelotas es algo muy diferente de lo que fuimos, por el mero hecho de que ninguno de nosotros es la persona que fue hace 10 años.

Aunque siempre estaré orgulloso de todo lo que hicimos en esos ayeres, he llegado a la conclusión de que, si en ese entonces, hubiéramos intentado algo cercano a lo que estamos haciendo hoy, simplemente no hubiera prosperado.

Mi sentir es que ninguno de nosotros tenía realmente la experiencia, el colmillo, la madurez, o siquiera algo interesante que contar. Éramos pues, aún muy jóvenes y no poseíamos una perspectiva completa de muchos de los temas que estaremos hablando.

Incluso tengo la teoría que tampoco estaba capacitado antes de dejar Clavería.

No pretendo decir que soy o no un buen escritor. El llegar a serlo es un proceso largo. Creo que voy por buen camino, pero eso no significa ni por error que ya esté en la meta. Me gustan mis escritos. Sé que existe gente a la que le gustan mis escritos, pero creo que son sólo escalones de una escalera mucho más grande.
Veremos cómo se desarrolla el proyecto. Procuraré irles platicando aquí la visión desde la cabina de control, pero recomiendo muy fuertemente que vayan al sitio y le echen un ojo a los otros colaboradores. Todos tienen algo interesante que contar, y todos tienen su propio estilo para contarlo.

Como dijera Ariel Roehuesos: gracias por leer, y gracias por leernos.

lunes, 10 de septiembre de 2012

Letras Con Pelotas!

Como les anuncié previa (y vagamente), hemos estado trabajando en un proyecto muy interesante. La gente de este proyecto es gente comprometida y talentosa (aún tengo que averiguar porqué me invitaron a mí :p).

Este proyecto se llama LetrasConPelotas y estamos involucrados algunos de los escritores de los blogs en mi lista de la derecha, y otros colaboradores trabajando en mantener el sitio operando, mas la que se vaya agregando al proyecto.

De momento vamos poco a poco llenando el sitio con nuevo contenido y con buena vibra. El sitio aún está en beta pero es algo que iremos ajustando conforme avancemos. Decidimos que el momento de compartirlo ha llegado y pueden encontrarnos aquí: www.letrasconpelotas.com

La existencia del sitio no va a significar la desaparición de este (descuidado últimamente) blog. Sólo que allá estarán textos mas abiertos a un público general, mientras que aquí seguiré escribiendo cosas de orden más personal.

Cuando nació la iniciativa de LcP decidimos antes que otra cosa, divertirnos trabajando en ello. Aunque todos nos hemos divertido bastante trabajando en crearlo, si quiero hacer un amplio reconocimiento a las tropas de asalto web que se han encargado de darle el aspecto (y las tripas para que funcione) que ustedes verán allá. Por supuesto también, échenle un ojo a los otros colaboradores. Valen mucho la pena.

Entonces, sin más que agregar, les invito a que le caigan. Eso sí, disculpen el polvo y el ruido de los trabajadores. Aún estamos terminando los acabados, pero ya estamos sirviendo en la terraza.

¿Mesa para seis? Por aquí, por favor.

sábado, 7 de julio de 2012

Leer y escribir.


Escribir no es fácil. Requiere un poco de técnica, un poco de ortografía, un tema interesante sobre el cuál escribir y una plataforma desde la cuál hacerlo. Requiere un cierto compromiso, tanto para uno como para una hipotética base de lectores. Requiere además, algo con lo que no todos nacen. 


Un poco de técnica puede aprenderse en un curso y ganar maestría con más cursos y mucha práctica. La ortografía puede conseguirse parecido, o tomar el camino arriesgado de la corrección ortográfica del editor de texto (aunque confunda "torreta" con "tortea", produciendo tutoriales de Starcraft sumamente incómodos).

Respecto al tema interesante, es una mera situación de perspectiva y gusto personal. Los caracoles pueden ser un tema apasionante para un cierto nicho, y siendo que un blog es completamente gratuito hoy en día, tanto plataforma como tema quedan al completo gusto del escritor.


Del compromiso, obviamente requiere tiempo, paciencia y disciplina. Aunque también una cucharada de contención. Si escribes mucho, te diluyes. Si escribes poco, pueden pasar dos cosas: si eres malo, te olvidan, si eres bueno, te puede dar el síndrome del Chinese Democracy (también conocido como el Efecto Duke Nukem). Pero el hecho es que vas creando una suerte de lealtad que te va impulsando a seguir escribiendo.


La verdadera parte compleja se encuentra en esa parte con la que tienes que nacer. Tienes que nacer con hambre de letras. Con un fuego que te obliga a gritar cosas. Con la necesidad de comprtir lo que piensas. Con el gusto por escribir.


Hay quien gusta de las historias, sin importar si es en letra, imagen o sonidos. Quien gusta de beber las ideas de otros. Quien simplemente no puede vivir sin leer. Escribir es una situación diferente. No importa en realidad el tema, el estilo, el medio. Lo que importa es dar salida a todas las ideas que se agolpan como gente a la entrada de una estación concurrida del Metrobús (disclaimer: sólo hablo del de mi ciudad, nunca me he subido al de León, pero cuento con que allá sean más civilizados). Es, para usar una muletilla popular aunque setentera: ...es que todos sabemos leer, pero pocos sabemos escribir (Querer y Amar, Manuel Alejandro/Ana Magdalena, 1977).


No. Tampoco estoy diciendo que seamos sólo unos cuantos los elegidos. El llamado es muy común, sólo que no todos lo siguen, y aún si lo siguen, no hay ninguna garantía de llegar a ser bueno. Es un proceso largo, cansado, lleno de raspones y críticas de las que nos hacen replantearnos la vocación mientras repartimos volantes en la Alameda (larga historia, no pregunten). Pero es un camino que se sigue gustoso, desde el bloguero con menor audiencia hasta el escritor laureado, pasando por el atormentado escritor maldito. Aunque ellos digan que no.


Pero ojo: así como existe la abeja, existe el quijotillo. Así como existe Pearl Jam, existe Creed. Así como existe la mantequilla, existe la margarina. Así como existen los vampiros, existen las hadas de Twilight. Así también, existen los escritores y los hambrientos de atención.


No es denuncia ni descarte. Escribir es un proceso tardado que toma años y mucho esfuerzo el completar. Si es que existe un final para ese proceso. Hay a quienes nos toma más tiempo que a otros y hay quienes simplemente lo logran al primer intento. Pero el factor común es el que todos escriben por el placer de hacerlo. No por las visitas, ni por las fans o las groupies (los escritores famosos también tienen groupies, ¿cierto?). Cuando lo que se busca es atención, se descarta el estilo para favorecer a la controversia. Afortunadamente, es ahí donde la tecnología nos permite un cierto grado de separación.


Explico con una palabra: tl;dr.


Bueno, extrictamente, no es una palabra, es una de esas rarezas que de pronto un día llegaron, se mudaron a la calle donde las demás palabras viven y, a ciencia cierta, las otras palabras aún no saben qué pensar. Si son buenos vecinos, si devalúan el vecindario, si quieren que su hija salga con el hijo geek de los nuevos vecinos.


tl;dr significa, acordemente, "muy largo, no leí". La gran mayoría de la comunicación escrita es inmediata, tiene una fecha de caducidad sumamente corta y suele ser sepultada en un continuo flujo de información.


Twitter, que es la versión evolucionada de la paloma mensajera, mide un máximo de 140 caracteres. Perfecto para mensajes instantaneos, avisar dónde andas (porque el mundo no puede vivir sin saber que ya llegaste al cine). Facebook es un poco más estable, sus aguas son mas calmas porque su información debe ser un poco más duradera. Links, videos, fotos familiares. 


En ambos casos, el escribir es más una función práctica que una artística (perdón si suena pretencioso, hablo enteramente de la intención, no del resultado). En el caso de un blog (y cosas más clavadas), la información es más permanente. Aunque el tema tenga fecha de caducidad, la longitud del texto y el tiempo entre posts le brindan una cierta permanencia.


El poner al alcance de todos una plataforma de difusión trae la enorme ventaja de permitir a cualquiera expresar sus ideas. Pero tiene la enorme desventaja de que cualquiera puede expresar sus ideas. En otras palabras, un martillo puede servir para construiri una casa, o para matar a alguien.


...pero si ese alguien es un zombie, entonces no hay problema.


Hace muchos años, cuando yo era niño, tan atrás en la historia que incluso Cine Permanencia Voluntaria era en Canal 4 y no existían los doblajes, sólo los subtitulajes (y así nos gustaba, damnit!), no cualquiera podía escribir. El poder publicar un texto se antojaba formal y docto. Un logro digno y valioso, por tanto, cualquier cosa que estuviera en un libro debía ser cierto, o por lo menos, haber sido revisado por alguien competente (Por eso J.J. Benitez llegó a donde está).


Si bien un libro no era palabra del Señor, si tenía una dignidad y autoridad como la que separa a los choferes de microbus de los pilotos de aviones de pasajeros. Pero eso fue en el pasado.


Hoy en día, publicar un texto y llevarlo al público general*, toma sólo algunos pasos. Y, nuevamente, eso no habla de la calidad ni para bien ni para mal. (*El publico general debe contar con una conexión a internet y un dispositivo para visualización de texto. CAT 0% informativo). 


La enorme diferencia se encuentra en el esfuerzo que requiere uno contra otro. Escribir en un blog requiere mucho menos esfuerzo que escribir un libro. Pero definitivamente mucho más esfuerzo que enviar un twit. Por ello, de montones de blogs que se abren cada año, sólo unos cuantos sobreviven al primer año, incluso al primer mes. Eso funciona como un filtro.  Sin establecer un juicio por la calidad del contenido, el que un blog se mantenga por un cierto tiempo habla del compromiso del escritor. Ese ya es un buen punto.


Para algunos, escribir es una necesidad. Aunque no siempre se tiene el tiempo, no siempre se tiene el tema, no no se tiene aún la capacidad, regresamos a la (metafórica) pluma y hoja blanca. Regresamos aunque hayamos estado lejos por meses, o años. Es una voz detrás de nuestra cabeza, a veces susrrando, a veces gritando, a veces cerrando Reforma. Es una voz a la que vale la pena escuchar.


No cualquiera gusta de escribir. No cualquiera es bueno. No cualquiera tiene algo interesante que decir. Pero cuando esas tres se conjugan, uno puede llegar a encontrar uno de los grandes placeres de la vida, y, gracias a que existen las plataformas públicas, uno también puede llegar a encontrar un segundo placer, que es el de compartir con los lectores.

miércoles, 27 de junio de 2012

De ires y venires (I).

Recién me había mudado a San Cristobal. Después de vivir a diez minutos de caminata de la primaria. Quince de la secundaria y veinte de la vocacional, vivir a más de una hora de camino se antojaba tiránico.

Sí, odié a mis padres por su decisión de mudarnos a San Cristobal.

Levántate a las cinco, para salir al menos a las cinco y media. Toma la combi que va a Indios Verdes. lucha salmónicamente (no salomónicamente, dos cosas distintas) contra todo el río de gente al entrar al metro. Avanza una estación, trasborda, llega corriendo a Ferrería, corre a estirar la tolerancia para entrar a clase de siete.

Los profesores del laboratorio de Metrología (que en ese momento se encontraba hasta la parte más alejada del campus) eran los profesores más extrictos que jamás tuve. Si al salir del metro eran las 6:54, nisiquiera me tomaba la molestia de correr. Sabía que no cubriría la distancia en menos de seis minutos. A las siete en punto la puerta se cerraba; reglamento interno my arse.

Es 1994, así que no hay metrobus, ni varias casetas a lo largo de la México-Pachuca. El tráfico no está adulterado ni refinado, nisiquiera cocido. Es tráfico puro y crudo. Incluso, para poder crear un río menos agresivo de gente, a la entrada del metro solían poner una reja a todo lo largo de la entrada. De ese modo, sin importar de qué andén entrabas, debías ir hasta el final del tunel del paradero y regresar. Teóricamente eso reducía la cantidad de personas por minuto en los torniquetes. Pero como la gente ni se crea ni se destruye, lo único que ocurría es que el tráfico se movía a las entradas al tunel.

Unas tres semanas en esa rutina, me encontraba escuchando (en mi poderosísimo walkman Onkyo) a Bob Marley. Three little birds. me encontraba caminando a lo largo de la reja de la vergüenza, y al llegar a la parte de "A melody pure and true", pasó una chica junto a mí. Creo que fue el olor de su cabello lo que me hizo voltear y me sacó de mis murmuros de fastidio. En ese momento ella buscó un lugar especial en la reja y se escabulló salvando casi todo el tunel. Al pasar del otro lado me miró a los ojos y me sonrió como si hubiera hecho una travezura. "This is my message to you-uh-uh".

Sonreí de vuelta. Jamás pasaría por ese espacio entre los barrotes, pero iría a dar mi vuelta sonriendo. Si alguien más podía divertirse a pesar de todo el tráfico de gente, y además compartir una sonrisa tan pura como esa, quizá había modo de sobrevivir al tráfico.

Mi ciudad es un monstruo. Pero uno que muchas veces te sonríe antes de engullirte.

viernes, 22 de junio de 2012

In Memoriam de la memoria.


No se si estén enterados, pero tendremos una elección la próxima semana.

Este es un post un tanto "especial". Aunque tengo mis convicciones sociales (no necesariamente políticas), no suelo hablar de ellas más que a un grupo cercano de personas en mi vida. Sin embargo, creo que esta elección si merece por lo menos un post.

Déjenme aclarar algo importante antes de comenzar: No creo en la democracia. Desde mi perspectiva, la democracia son 100 personas brincando a un volcán activo porque 95 personas se sienten atraídas por las cosas brillantes y los 5 geólogos que saben que no es buena idea, no alcanzan una mayoría. Sin embargo, nuevamente desde mi punto de vista, los otros sistemas sociopolíticos tienden a fregar aún más al ciudadano de a metro.

Teóricamente la democracia debiera funcionar, siempre que cada votante se ponga las pilas y medite su voto. Y para meditar su voto, por muy de papelería que suene, es necesario que considere a futuro, pero jamás olvidando el pasado. Y en realidad a eso se resume: Pensar muy a fondo cómo vamos a vivir los próximos seis años.

Hace un par de años, Felipe Calderón hizo el comentario de que tenemos la seguridad de una ciudad europea. La gente se le fue encima por considerarlo una obvia mentira. A esa gente le hace falta saber que Sarajevo también es Europa. Tenemos el terrible problema de que la violencia ha aumentado gravemente en los últimos años. De mediados de Fox para acá. Es fácil decir "¡Ni un paso atrás! ¡No podemos rendirnos en la guerra contra el narco!" Y aunque también esa es mi convicción, es la cómoda opinión de alguien que vive en una ciudad donde (aún) no tenemos que esquivar balas para ir a trabajar.

Creo firmemente que si gana el PRI, esa violencia bajará drásticamente. Pero no nos engañemos. La única razón por la que existe esa violencia es porque el gobierno actual no pactó como pactó el gobierno priista en las décadas previas. La violencia bajará no porque se acabe el poder del narco, bajará porque se llegará a un acuerdo que además, nos pintarán de victoria gubernamental. Sin embargo, aunque algunos pensamos que la guerra contra el narco debe seguir peleándose, también es importante para una familia garantizar que sus hijos no vivan encerrados en sus casas por miedo a una balacera casual. ¿Podríamos culparlos por querer pactar una tregua?

Dice Peña Nieto, en su media lengua, que si gana vamos a ganar más por nuestro trabajo. No lo dudo. Pero es otro espejismo. No dudo que si hoy gano cien pesos, dentro de seis años ganaré trescientos. El gran problema es que tampoco dudo que si hoy una coca me cuesta diez pesos, en seis años me costará doscientos. La economía es un ser complejoque tiene más que ver con temores sociales que con verdaderas ecuaciones (lo siento contadores, sus ecuaciones son... digamos... "especiales").

No tengo edad suficiente para atestiguar el modo en que el JoLoPo defendió como perro al peso. Pero si recuerdo las limitaciones que mi familia tuvo que soportar ante la ineptitud de Miguel de la Madrid (qepnd... no, la "n" no es typo, es intencional) y su record de inflación sexenal. Recuerdo el Error de Diciembre en el 94, y mi incertidumbre sobre si podríamos comer con un dólar a trece pesos. Y recuerdo otras cosas más acerca de tiempos del PRI. Recuerdo a Durazo y la ceremonia -en cadena nacional, nada menos- que era besarle el trasero al Señor Presidente en turno en cada informe presidencial.

En ese entonces, justo como ahora, existía la manipulación mediática. Pero la gran diferencia entre aquellos tiempos y estos, es que sólo existían unos cuantos canales de televisión y radio. Manipular la opinión era fácil. Hoy todo el mundo trae una cámara y la facilidad de gritar sus experiencias al mundo en tiempo real, tal y como ocurrió en la famosa protesta de la Ibero.

A los priistas se les conoce como Dinosaurios por el tiempo que estuvieron en el poder. Cuando los sacamos de Los Pinos, tuvieron que buscar nuevamente el voto de los jóvenes. Madrazo usó la idea del Nuevo PRI. Pero después de la protesta de la Ibero, ver los encabezados de los periódicos manipulados me recordó los tiempos en que el gobierno priista sabía que su verdad mediática era la única verdad. Mi miedo no es que sean iguales. Mi miedo es que sigan creyendo que aún son sus tiempos de gloria y no hayan notado que el mundo ya cambió.



No les digo que se que Peña Nieto será igual. Sólo digo que yo recuerdo cómo fueron los años del PRI.


Y no se trata de alabar al gobierno actual. Mientras que el gobierno priista trajo siempre miseria a mi familia, durante el panismo pude hacerme de mi casa y de ciertos lujos que antes no creí posibles. Ojo: No poseo una empresa y por tanto no puedo más que hablar a nivel de mi economía personal, pero dada la situación internacional, creo que no nos ha ido tan mal. Así que en ese lado no hay queja. Mi queja va a otra serie de niveles que, desafortunadamente, me es restregado continuamente en la cara.

Hablé en otro post acerca de la SOPA y el oscurantismo. Salió completamente de pasada la ley Döring. Una enorme preocupación con el panismo ha sido siempre que son conservadores. Recientemente uno de sus senadores, Federico Döring, propuso una serie de reformas a la ley del IMPI para reducir la piratería digital. No es mala idea, siempre que no atente contra las libertades del individuo. La propuesta de ley fue finalmente descartada. Eso da un respiro. Sin embargo, con ese antecedente, este es el apoyo que dicho senador le da a la candidata del PAN


No exactamente Mary Poppins, y me toca ver estos carteles todos los días.

Mi preocupación con el PAN es un poco más fundamental, más... de feeling. Es el partido más conservador, ha estado en el poder 12 años, el foxismo fue una de las mayores decepciones de la historia de México (mas por lo que se esperaba que por el desempeño real). No estoy del todo seguro de que sea el partido más capacitado para proponer a una mujer como candidato a la presidencia. Y no me hagan mucho caso, pero creo que simplemente no han encontrado cómo vender la idea, porque no han terminado de comprender la idea.

El equipo de campaña de Vázquez Mota (yo sospecho que fueron a una escuela a conseguir becarios en lugar de profesionales) se basó en el slogan "diferente". Pero nunca dijeron diferente porqué. ¿Porque es mujer? Esa sería la respuesta obvia (y sumamente tonta). Pero sus promocionales nos dicen que es porque en cada entrega usaron a un equipo diferente. Le decimos a esa serie de apariciones y promocionales "campaña" para poder etiquetarla, pero la verdad es que no han sabido vender la idea.

Y tras toda esa larga perorata, uno podría preguntarse qué tiene eso de importante.


 Una palabra: Juanito.

Hablamos del partido en el poder, con la primera candidato mujer de la historia de éste país, tratando de dar continuidad al trabajo de dos presidencias y con dos adversarios de alta popularidad. Si con ese trasfondo y esos recursos esa es la mejor campaña que pueden presentar, no quiero ni imaginar qué va a ocurrir cuando tengamos una microinsurgencia en Michoacán cuando quieran declarar su independencia (¿Qué? ¿A poco sólo en Escape de Nueva York se permiten las independencias ficticias?). Tenemos una de dos: O será una marioneta de gente más competente pero menos "popular" o simplemente el PAN no supo qué hacer tras doce años de gastritis y decidieron buscarse "un plan tan loco que podría incluso funcionar".

No estoy diciendo que sea ella incompetente. No necesito hacerlo. Ella lo está haciendo elocuentemente.

Pero por otro lado, votar a favor de ella tendría una gigantesca ventaja: Continuidad.

Dice el chiste que el mexicano le dice al japonés que admira a su país porque se levantaron después de que su economía quedó deshecha tras la segunda guerra mundial. Le contesta el japonés que él nos admira más, porque nosotros nos levantamos igual cada seis años.

Si bien no es muy buen chiste, si es un gran anecdotario de cómo solían ser las cosas durante el priismo, donde siempre el nuevo en el poder declaraba que el anterior no supo hacer las cosas y todo debía cambiar. Comenzando por el nombre de las secretarías (con acento). No se si esto sea por mera hubris, o por una versión sexenal de la anécdota de las dos cartas de Nikita Kruschev a Mikhail Gorvachev.


Lo que sí se es que tener a Vázquez Mota en el poder nos daría otros seis años para dar cause a proyectos que, de ganar cualquiera otro, serían cerrados de inmediato. Uno no lo nota, porque ese tipo de cosas sufren del síndrome de la chacha: solo se nota cuando están ausentes. Mi memoria sólo abarca unas cuantas décadas, pero, para los que recuerdan mas, recordarán el frenón económico y quasi obligatoria devaluación con que se iniciaba un sexenio.

Y hablando de sexenios, ¿cómo es que el Peje se va a reelegir? Recuerdo vivamente que hace seis años gritó y pataleó y cerró Reforma bajo pretexto de que había ganado, así que hizo su toma de protesta, abanderamiento y pesebre de niño Dios en el Zócalo. Si ya era el presidente lejítimo (con j de Peje), ¿cómo es que se postula de nuevo? ¿porqué su gabinete alterno no le dice que no se vale la reelección?

me encontré con esta imagen hace unos días:



Periodismo!


Sólo tengo un comentario al respecto: Mientras que Atenco (justa o injustamente) fue por protestas porque querían desalojar a gente de sus casas, Reforma fue cerrado por el berrinche de un personaje que dijo que acataría el veredicto del IFE y al que le importó muy poco el famoso pueblo que tanto dice defender. Su primer spot de radio en estas elecciones decía, literalmente "Ofrezco mi mano franca en señal de reconciliación, de amistad, a quien pude haber afectado en mi determinación de luchar por la democracia y la paz".

Mi primer comentario es que "disculparse" y "reconciliarse" no son sinónimos. Mi segundo comentario es que lo que hizo, fue justo contra la democracia. Una mayoría, por pequeña que fuera, eligió a alguien más. Porque no fue él, hizo su berrinche. Eso es justo lo opuesto a la democracia. Puede que Peña Nieto no haya leído más de tres libros, pero aquí da la impresión de que López Obrador no sabe para qué sirven los diccionarios.

Este berrinche, por cierto, no es el primero. Recordemos que tomó en algún momento las refinerías de Tabasco cuando no fue candidato a gobernador. ¿Que no podía permitirle su conciencia seguir en el PRI? vale. Pero en ese caso, ¿no es algo sospechosista que dejara el PRI después de no ser postulado para gobernador de Tabasco en el 94, pero que sumara casi veinte años de militancia llegando incluso a presidente del partido en su estado?.

Más aún, ¿podría alguien con su corta visión ser un buen presidente? Escuché algunas de sus propuestas. Entre otras, más egresados de las universidades. Esto les sonará controversial, pero la verdad es que desde hace muchísimos años, no necesitamos más profesionistas. Necesitamos MEJORES profesionistas. La idea que quiere vender es que todos sean doctores y abogados o ingenieros. Sin importar que su nivel sea apenas de técnico calificado.

Su idea es vender que todos sean felices a cambio de nada, a cambio de su voto, él vendrá a resolver todos los conflictos y todas las carencias a cambio de nada, del voto. No habla de que para que el país salga adelante, necesitamos empleos, condiciones económicas óptimas, oportunidades. Pero que absolutamente todas esas cosas van a costar mucho trabajo. Que una economía basada en vendedores de discos piratas y tianguistas mafiosos no tiene la menor oportunidad simplemente porque ya no es el siglo XVII. Exprimamos entonces a los que sí pagan impuestos. Porque nosotros seremos a los que nos va a tocar soportar a la economía nacional.

Vende la idea de que sólo el pueblo puede salvar al pueblo. ¿Quién es el pueblo? ¿yo soy el pueblo? ¿todos somos el pueblo? ¿sólo el pueblo puede salvar al pueblo? ¿alguien ya le preguntó de qué necesita(mos) ser salvado(s)? ¿Las fuerzas oscuras? ¿en serio sus seguidores no ven los tintes mesiánicos y protagónicos de éste señor?

Uno de sus puntos fuertes es la democratización de los medios de comunicación. ¿Qué significa eso? ¿Que cualquiera va a poder expresar sus ideas en televisión? Eso implicaría que el estado tendrá autoridad sobre el contenido en los medios, ¿cierto? Y si ese es el caso, ¿significa que va a expropiarlos? ¿Que tendremos La Hora del Peje? me suena conocida esa idea. Creo que hay otro presidente actualmente con un programa semanal en el que platica con su amado pueblo. Curiosamente me parece recordar que este presidente cambió la constitución de su país para poder reelegirse. Y curiosamente lleva más de dos periodos en el poder y se prepara para uno más. Ah, y por cierto, su encargado de campaña declaró que su campaña estaría marcada por el amor. ¿Les suena conocido?

¿Saben en qué otra cosa puedo igualar a Chávez con Obrador? En que no imagino, a ninguno de los dos, entregando la banda presidencial diciéndole a su sucesor "aquí está el poder, ahora te toca a tí" como le tocó hacer a Zedillo ¿Ustedes sí?

La única ventaja que veo con Obrador en el poder, es que quizá es el candidato que, de llegar al poder, causará los menores estragos post electorales. Si hace seis años hizo ese berrinche, este sexenio sí puedo imaginar muertos y heridos. No lo voy a negar. De todos los candidatos (incluido el de chocolate), éste es el que me da más miedo. Sin embargo me friego. Somos un país democrático. Saltemos al volcán.

Y antes de que alguien cite al spot de "tengo miedo", déjenme decirles: las únicas personas que no tienen miedo en esta elección son las que a) no saben la importancia que tiene esta elección, o b) no quieren ver la importancia que tiene esta elección.

De Cuadri hay muy poco qué hablar. Dudo que alguien lo esté tomando en serio. Circulando, circulando.

Nos quedamos entonces con el último grupo de votantes: Los que no van a votar.

Miren, no voy a soltar el discurso electorero de "es su obligación ciudadana" y etc. Hay quienes creen en el IFE, hay quienes no. Su derecho a votar, como dije en algún momento, igual que a qué Dios adoran o con quién se acuestan, es algo tremendamente íntimo sobre lo que a todo el mundo le gusta opinar y forzar su perspectiva. No aquí. No les digo que voten. Ni les digo que no voten, ni que anulen su voto o que le pinten garabatos inapropiados en la boleta a los escrutadores (estoy mirando hacia tí, tú ya sabes quién eres).

No votar puede ser una forma de protesta ante la idea de que el voto no cambia nada. Pero si se toma esa decisión, también debe pensarse ¿qué cambia si no votan? Y no es una pregunta triunfalera del corte de "¡el cambio no sucede sin tí!". En una muy real pregunta de "Si no votas, ¿en qué ayuda?" Si uno u otro no cambia nada, no votar nos evita la molestia de ir a la casilla, y se vale. Pero si esa es la única razón para no votar, quizá sea momento de darle una pensada extra. Total, esto ocurre sólo cada seis años.

Todo lo que puse aquí tiene un sólo objetivo: mostrarles sólo el polvito de encima de los candidatos importantes. O de la opción de abstenerse o anular el voto. La decisión que tomen es enteramente suya, sin importar a qué color le vayan. Yo ya se por quién voy a votar (o no votar), pero ese es MI voto. Yo lo único que pido es que mediten mucho su voto, que piensen bien cómo podrían ser los siguientes 6 años. Que lo piensen ustedes, sin toda la manipulación mediática. Que vean qué han hecho los candidatos a lo largo de su vida y cómo se han comportado sus partidos a lo largo de la historia.

Vale, concedo que, como dice la (falsa) Gandhi, no tenemos memoria, pero les recuerdo que ya tenemos google para poder buscar información de años atrás. Aquí ustedes podrán argumentar que no todo el pobrecito y fregado pueblo tiene internet y que por eso debemos votar por [inserte aquí a su candidato] para que nos den internet gratis a todos.

Mi respuesta es que si no tienes internet es muy difícil que leas este post. En otras palabras, como dijera alguna vez un locutor de la fenecida Pantera, "Muchos saludos a los que nos escuchan, pero a los que no, no".

lunes, 30 de abril de 2012

Checkpoint!

Ya pasaron 4 de las 8 semanas. Ha sido agotador, pero ha retribuido. Seguimos echándole ganas, porque ya falta menos. Ya sólo un par e proyectos del maratón y en medio de ellos, los cursos de Irapuato.

Falta menos, pero aún muy atareado para escribir. Vamos a la mitad, regreso en cuanto pueda.

Gracias por esperar.

domingo, 1 de abril de 2012

This Story Is Happy End!


Ghosts n Goblins es uno de los videojuegos más difíciles de la historia.

Mi reino por un RPG!

Si ustedes consultan diferentes publicaciones de videojuegos haciendo un recap de los juegos más difíciles de la historia, encontrarán en los primeros lugares (en diferente orden, dependiendo a quién pregunten) a Ninja Gaiden (NES, Tecmo, 1988), Battletoads (NES, Rare, 1991) y Ghosts n' Goblins (también conocido como Gouls and Ghosts, Arcade, Capcom, 1985).



¿Sólo una vida? ¡neeeeeerd!


Si van al 1:35, verán el cambio de escenario. En él se aprecia un mapa de lo que te falta para llegar hasta el salón principal para salvar a la Princesa Prin Prin. Cuando este juego estaba en la farmacia y veía el mapa, tenía la idea de que era todo un gigantesco mundo por recorrer. La tonada (mezcla curiosa de ragtime orquestal) ha estado sonando en mi mente cada vez que veo mi calendario para los siguientes dos meses.

Estaré trabajando en varios proyectos simultáneos en dos plantas además de estar otras cuatro semanas en el Bajío dando una clínica de detección de fallas y un seminario de comunicación industrial. O toca trabajar en Sábado, o Domingo, o ambos. No es la gran cosa, hay mucha gente que sólo descansa un día a la semana. Lo pesado de esta ocasión es que todo será en planta.

Mi trabajo, como he comentado antes de es control industrial y paso la mitad de mi vida desarrollando aplicaciones en escritorio y la otra mitad, echándolas a andar en planta.

Mientras que la primera parte es cómoda y segura, con cafecito, messenger y la tranquilidad de saber que me voy a mi casa a las 6pm, la segunda es tensa, dificil, comprometida, y uno se va a casa hasta que queda corriendo todo.

El desarrollo es la campaña single player. Planta es un multiplayer donde -casi- todos están en tu contra, suerte incluída, y no puedes simplemente desconectarte.

De niño, como probablemente a todos los niños, mi madre solía decirme que tenía que estudiar para poder tener un trabajo donde desde un escritorio me dedicara a firmar y cobrar.

Yo, como buen n00b en la vida, le creí.

Nuestros padres tienen la idea de que ir a la universidad es una garantía de éxito en la vida. Esto probablemente viene de que ellos crecieron en una época en la que ir a la universidad era sólo para los muy ricos o los muy inteligentes. En resumen, una época en que la calificación de las universidades no estaba ligada al número de egresados.

Por eso, quizá, mucha gente aún tiene la idea de que un símbolo inequívoco de tu éxito es la cantidad de dinero y tiempo libre que tienes.

Nada más falso.

John Cheese escribió esta semana un gran artículo acerca de las diferencias entre trabajo y carrera. Le creo y concuerdo. Un buen signo de qué tan bien haces tu trabajo es la demanda que tienes. Aún siendo empleado. Me ha tocado vivirlo. Pero más importante, me ha tocado escuchar comentarios de personas en canales diferentes y su percepción me sigue pareciendo por demás curiosa.

Los que nos dedicamos a control industrial tenemos un fenómeno curioso: puentes, dias festivos, semanas cortas, fines de semana largos, son nuestro momento de brillar. Ese es el único momento en el que realmente podemos realizar cambios significativos. Por eso, para mí, los puentes y dias festivos son dias de trabajo rudo. No días de descanso.

Los que viven en otro canal, tienden a asumir que trabajo esos días porque mi jefe me manda y porque me tratan mal. He escuchado comentarios desde "Pues habla con tu jefe para que no te cargue la mano" o "¿Porqué no buscas un empleo con diferentes condiciones?" hasta condescendientes "descuida, ya legará el momento en el que tú sólo ordenes desde un escritorio". Mi sociopática respuesta siempre es la misma: "si, ya llegará". Sonrío con cuatro músculos faciales, procedo a borrar a esa persona de facebook, messenger, celular, y, sólo por precaución, de ICQ.

El trabajo es dificil, es rudo, es estresante, es demandante en cuanto a tiempo. Pero es lo que me gusta hacer. Por eso lo hago gustoso. Por eso el año pasado lejos de quejarme de estar trabajando toda Semana Santa, escribí un post en el que hacía patente mi felicidad.

Hay un momento en el que puedes sentir como se eriza tu piel y una euforia callada te invade en el momento en que echas a andar una aplicación y todas las luces van a verde y un montón de cajas con producto marchan elegantemente a los trailers que los llevarán a los supermercados. Hay un momento en que puedes sentir un agradable calor cuando te paras frente al cliente, tu jefe, otros programadores, y todo lo que dices tiene completo sentido y sabes sin duda que acabas de tocar con imaginarios dedos la proverbial fogata después de la cacería.

Este año me llena de orgullo que los próximos dos meses dificilmente tendré un fin de semana para mí. Me siento orgulloso de que en una compañía con gente que me lleva décadas de experiencia me tengan atendiendo tres plantas en lugar de una como a otros compañeros.

Algunas personas ya me han preguntado si no pienso pedir un ascenso en el que trabaje menos y mande más. A esas personas (salvo a mi padre) les he contestado con una rodada de ojos. A mi padre le he explicado que estoy donde quiero estar y que aquí soy feliz. Que quedarse en un puesto no significa quedarse en tu zona de comfort mientras sigas buscando ser mejor en un área que toma décadas dominar. E incluso, que si fuera mi zona de comfort, tampoco tiene nada de malo quedarse ahí por un rato.

Sé que los que trabajan en ritmos parecidos me comprenderán. Aquellos que tienen un perfil diferente, o se cambiaron tiempo atrás de trabajo, o ya se murieron por enfermedades causadas por el estrés.

Ahora, hacía mención al mapa de Ghosts n Goblins porque al final de esos dos meses en mi calendario hay una barra gris que comienza el Sábado 26 de Mayo y concluye el Domingo 3 de Junio. Esa barra tiene un texto que dice "Vacaciones". En el mapa, corresponderia al salón en el que Sir Arthur debe salvar a la princesa Prin Prin.

En mi vida, esa será la semana en que me mudaré al nuevo proyecto cuya sede aún no tienen nombre. Serán dos meses agobiantes, pero sé que valdrá mucho la pena. Ya habrá tiempo para dormir una vez mudado. De momento, ¡A Darle con todo a esos proyectos/cursos/diseños/problemas/emergencias!

A diferencia de trabajos anteriores, sé que si se me envía a una misión es porque me consideran capaz de llevarla a buen término, no porque mi jefe quiera irse de vacaciones y me pase su carga de trabajo; eso lo sé porque él estará conmigo todos estos días, pero en otros proyectos. Así es como un jefe se gana el respeto.

Valdrá la pena por la experiencia y por el renombre. Pero más importante, para mí vale la pena por saber que estoy desarrollando todo mi potencial, y quizá un poco más.

...Eso, y las horas extras
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